Aplicación diaria del MML

Las acciones y actividades que realizamos en el día a día, contribuyen a lograr y generar nuestros resultados; estos son los componentes que alimentan en el corto y mediano plazo a la contribución de nuestros propósitos -siempre y cuando los factores externos se den favorablemente-.
Y es precisamente el propósito, la intención fundamental de vida que rodea nuestro acontecer y es el objetivo hacia las diversas áreas de enfoque.
Resulta imposible lograr nuestro fin con un simple propósito en la vida, es por eso que es de gran impacto, intervenir de manera decidida para lograr un cambio que no sea causal sino planificado.
¿Pero como darle un seguimiento puntual a nuestro desarrollo humano?
Se requiere de Consistencia y Resultados; esto sólo se puede valorar, con la verificación de la pertinencia de nuestras actividades con sus objetivos y resultados esperados. Es decir, valorar y reflexionar, si estás haciendo lo correcto o no. Así mismo, el resultado y el impacto final deben ser medidos, los indicadores -por cierto- deben ser congruentes con lo que se pretende medir.

Parece un tema trillado, pero atrás está toda la teoría del #MML.

Fernando Mellado Meza

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