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El uso del internet en México de 2012 a 2016 creció 56%, pasando de 45 millones de usuarios a 70 millones, según el estudio realizado por la AMIPCI.
No sólo ha crecido el número de usuarios, sino la brecha de tiempo de exposición, barrera de edad y de nivel socioeconómico. En ese sentido, es importante analizar la importancia que va a jugar el internet, especialmente las redes sociales en la elección de 2018. Por un lado, tenemos mayor capacidad de penetración del medio y una mejor segmentación de los targets; las métricas y el control que ofrece sobre la eficiencia y rentabilidad de los impactos es otra ventaja por encima los decadentes medios tradicionales.
En tiempos electorales y de coyunturas políticas, llámese crisis gubernamental, social o económica, el internet se convierte en un importante protagonista, pues posee la capacidad de masificar el mensaje y hacerlo viral, este fenómeno puede marcar tendencias en el pensamiento colectivo, pues a pesar de ser generado básicamente en la clase media baja y media alta (70%), rápidamente puede convierte en un mensaje boca a boca con gran capacidad de penetración. Para que lo anterior se logre, los equipos de campaña tienen especialistas en el manejo de las redes sociales, generación de contenido y expertos en la medición de los impactos, nada es casualidad, aunque así lo parezca, todo esta medido, incluso desde el día, la hora y la forma en que los impactos son lanzados al electorado.
El dato importante es que la legislación mexicana se quedó en los medios tradicionales, dejando en descontrol los medios digitales, esto genera una serie de problemas en la forma en que se regulan los medios, máxime cuando los impactos más importantes se van a estar generando en las redes sociales.
Actualmente en el país el promedio de uso del internet es de 8 horas contra 3 de la televisión, esto permite inferir la dimensión de la exposición de los medios digitales, sin embargo, es importante poner en la mesa que la gran cantidad de medios y la facilidad con la se puede accesar a la publicación digital ha generado por una parte, una mayor cantidad de material de análisis y opinión, desde voces serias hasta las más falsas y tendenciosas; en contra sentido, también se ha modificado la forma de rivalizar en el terreno electoral, usando la capacidad de masificación del impacto como herramienta para hacer campañas negativas y de influencia.
Hoy en día, el internet esta jugando un papel clave en la comunicación electoral del 2018, una forma de hacer campañas esta por venir, aquellos que decían que se tenían que ensuciar los zapatos caminando, puede que deban reconsiderar el dicho y ensuciarse con polvo digital, pues un nada despreciable 63% de la población es usuaria del internet, además con un promedio de uso del medio de 7 años, es decir, un medio que empieza a madurar muy rápido y que los canales de acceso son muy diversos y variados, el impacto puede llegar cuando estas en la casa, en el trabajo o la escuela, incluso en cualquier lugar (74%) a través de los móviles.
Mtro. Fernando Mellado Meza